En los últimos años, las formas de trabajo evolucionaron y los colaboradores chilenos han experimentado una transformación en sus vidas profesionales, a causa de la adopción de modelos de trabajo flexibles. Un reciente estudio titulado “La paradoja del trabajo flexible en Latinoamérica”, dio a conocer los intereses de los empleados y las prioridades a la hora de elegir un trabajo o mantenerse en el que tienen.
Una de las principales preocupaciones de los trabajadores radica en los tiempos de traslado. “Algunos de nuestros members ocupaban diariamente 2 horas de su tiempo para traslado entre trabajo y hogar. Al hacer una suma sencilla, nos dimos cuenta que utilizaban al menos 40 horas al mes, o sea una semana laboral casi completa en Chile. Con el trabajo híbrido o remoto, estos tiempos se pueden ahorrar y los colaboradores pueden mejorar su calidad de vida”, indicó Víctor Parra, Country Manager de WeWork Chile.
Tras la crisis sanitaria del Covid-19, el panorama laboral en Chile se transformó, con el 72% de las empresas implementando modificaciones significativas para adaptarse a los nuevos modelos de trabajo. Los colaboradores también han ajustado sus prioridades y deseos profesionales, y uno de los aspectos más valorados es la flexibilidad para equilibrar la vida profesional y personal.
De acuerdo con el estudio, el 1% de los encuestados expresó un deseo por un esquema de trabajo puramente presencial, mientras que un 18% mostró interés en un modelo completamente remoto para aumentar la productividad y reducir los tiempos de traslado. Por otro lado, el 14% optaría por un esquema híbrido que ofrezca flexibilidad y un espacio de colaboración con sus equipos sin comprometer su equilibrio entre vida personal y profesional.