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Foto del escritorEquipo La Galería M

Usuarios de e-Scooters emplean 11,5 minutos por trayecto para transportarse en Santiago


Santiago está dando pasos en la dirección correcta para dejar de ser la ciudad con la peor calidad del aire de América Latina. Según la empresa suiza IQAir, la capital chilena es la más contaminada de la región, por lo que el Gobierno ha decidido imponerse el ambicioso objetivo de que el transporte urbano sea totalmente eléctrico en 2050.


La electromovilidad y las acciones para promover la eficiencia energética en el transporte son parte de los principales esfuerzos que permitirán a Chile alcanzar la carbono neutralidad, contribuyendo con cerca del 20% de las reducciones de CO2.


En lo que va de 2023, la calidad del aire en Santiago ha registrado el nivel más bajo de contaminación en un cuarto de siglo, a lo que ha contribuido el aumento de las precipitaciones. Pero aún queda mucho camino por recorrer. Además de una flota de transporte público que debe renovarse, Santiago se enfrenta al problema del volumen de tráfico. Según el último estudio TomTom Traffic Index 2022, la capital ocupa el undécimo puesto entre las ciudades más congestionadas de Sudamérica, y el 69º a escala mundial. El tiempo medio empleado por cada 10 kilómetros recorridos es de 20 minutos y la velocidad media en hora punta de congestión es de 23 kilómetros por hora.


Por ello, implementar soluciones de transporte urbano ágiles (que alivien el tiempo y estrés de la población) y ecológicamente responsables (menos emisiones y menos contaminación acústica) es clave para que Santiago logre su objetivo.


Alineado con esta misión, Whoosh acaba de ampliar su oferta de scooters eléctricos a 2.000 unidades, operando en las comunas de Las Condes, La Reina y Vitacura. Desde mayo, cuando la empresa de micromovilidad comenzó a operar en la capital, los usuarios han recorrido más de 200 mil kilómetros, el equivalente a 24 viajes entre Santiago y Nueva York. Además, se estima que se han ahorrado 140 toneladas de CO2 emitidas por autos y buses.


"El análisis de los datos de Whoosh indica que la duración media del trayecto es de 11 minutos y 30 segundos. Esto significa que las personas arriendan nuestros scooters para satisfacer sus necesidades de transporte en trayectos cortos, por ejemplo, para ir de su casa a las paradas de transporte público, al gimnasio, al lugar de trabajo o a otro punto de actividad empresarial y social, porque simplemente es más fácil y cómodo", destaca João Pereira Reis, director regional para América Latina de Whoosh.


Con la incorporación del servicio en la comuna de Vitacura, el número de viajes con scooters Whoosh casi se ha duplicado en el último mes. En total, los usuarios han aumentado un 33%, lo que indica una gran demanda del servicio para fines prácticos del día a día. El 89% de los viajes se realizaron para satisfacer las necesidades de transporte de los habitantes de Santiago.


La tecnología punta que ofrece Whoosh en sus scooters no sólo permite desplazamientos ágiles, seguros, silenciosos y sin emisiones, sino que también contribuye a mejorar la fluidez del tráfico en la ciudad. Además de geolocalizar cada vehículo, el dispositivo IoT incluido en todos los patinetes acumula en la nube los datos de los desplazamientos de los usuarios. El análisis posterior del big data permite conocer las mejores rutas, las vías más utilizadas y las formas más eficientes de desplazarse por la ciudad.


"En Whoosh tenemos el modelo de scooter compartido más moderno de Sudamérica. De esta forma podemos comprometernos con la mejora del sistema de transporte público de Santiago, ofreciendo soluciones para el día a día de sus ciudadanos, desde un punto de vista responsable con el medio ambiente y con la seguridad de los usuarios", añade João Pereira.


Para más información, por favor contacte a: whoosh@sherlockcomms.com

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