La noche en que recibimos el Año Nuevo empieza temprano y en nuestra preparación el maquillaje ocupa un lugar importante y si nos gusta celebrar largo además surge la necesidad de que nos acompañe mucho tiempo. Por suerte esto es posible siguiendo algunos trucos:
Lo primero es preparar el rostro antes de aplicar cualquier producto. Con la cara lavada e hidratada puedes usar tu crema cotidiana y algún serum, este complementa la hidratación y penetra las capas más profundas de la piel. Luego aplica un bálsamo labial que hidrate los labios por unas horas.
El primer (pre base) se usa antes del maquillaje y se aplica igual que una crema. Alisa y suaviza la textura de la piel, al mismo tiempo que crea una barrera entre el producto y el rostro. Esto hace que el maquillaje quede fijo y dure más.
Si quieres agregar toques glow a esta fiesta puedes usar una sombra con brillos. Un truco para que los brillos se queden donde los dejaste (en el párpado), es usar antes una sombra en crema de un color similar, as, esta funciona como un tipo de pegamento.
Si quieres profundizar tu mirada, la mejor opción será un delineado cat eye, esta técnica nunca falla en el look de noche. Pero si decides dejar tu mirada simple, no puedes dejar de llevar el color a tus labios. Ideal que sea de larga duración como la línea Colorfix, de ÉSIKA, que viene en formato líquido y en barra, con acabado matte, satinado, metalizado o perlado).
Ensaya el look que más te guste y disfruta sin pasar susto de que el maquillaje te abandone.