Las alergias no tienen fecha para quienes las sufren pero sin duda cuando más se manifiestan es durante la primavera y eso porque durante esta época aumenta la presencia de alergenos en el aire. Esto significa que es mayor la cantidad de sustancias que nos producen una reacción a través de la respiración, alimentación o tacto.
La duración de esto es relativa a cada persona y tal como explica el doctor Pedro Mardones, Inmunólogo y director médico del Centro del Alérgico, “el principal síntoma es la obstrucción de las vías respiratorias, haciendo que la persona tenga la sensación de tener la nariz tapada”.
Claro que no es lo único, también se puede notar irritación de la nariz por picazón, estornudos reiterados o mucosidad excesiva. El profesional agrega que "si la persona sabe que es alérgica, la clave está en prevenir. Debe consultar al médico antes de la llegada de la primavera para recibir el tratamiento oportuno y evitar las molestias y posibles consecuencias de las alergias”.
De no tratar a tiempo la persona podría verse afectada por apneas o trastornos del sueño. Esto según el inmunólogo puede causar la aparición de enfermedades como:
Infección rinosinusal: Como la sinusitis aguda, con posibilidad de evolucionar a una sinusitis crónica.
•Descompensación respiratoria: En personas asmáticas, una alergia no tratada puede generar una crisis respiratoria.
•Sangrado nasal: Se produce por excesiva manipulación de la mucosa al sonar la nariz.
Prevención, una palabra a tener en cuenta para una buena calidad de vida, especialmente en primavera.