Inteligencia artificial y pasto, esas son algunas de las características de Oxygene, el neumático diseñado por Goodyear. Es un prototipo, pero es el punto de partida para la aplicación de las tecnologías en los próximos productos de uso masivo.
Oxygene fue presentado en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra, Goodyear y posteriormente estuvo en Chile para realizar una muestra por Chile y Latinoamérica y de esta forma dar a conocer sus ventajas.
Este neumático del futuro tiene en su exterior musgos vivos en su costado lo que permite que absorba y haga circular la humedad y el agua de la superficie, permitiendo la fotosíntesis y la liberación de oxígeno al aire.
Ese es una de sus grandes aportes y tal como lo destacó José Tomas Santomingo, PBU consumer de Goodyear Chile: “Con la previsión de que más de dos tercios de la población mundial viva en las ciudades en 2050, la demanda de redes de transporte en entornos urbanos aumentará sustancialmente” y agregó que “una infraestructura y un transporte más inteligente y ecológico serán cruciales para abordar los desafíos más urgentes de la movilidad y el desarrollo urbano”.
Entre las principales características de Oxygene se encuentra que:
· Aporta oxígeno: Absorbe la humedad de la carretera a través de su banda de rodamiento única e inhala CO2 del aire para alimentar al musgo de su banda lateral, liberando oxígeno mediante la fotosíntesis. En una ciudad similar en tamaño a París, con cerca de 2,5 millones de vehículos, esto significaría generar casi 3.000 toneladas de oxígeno y absorber más de 4.000 toneladas de dióxido de carbono por año.
· Reciclaje de neumáticos: Oxygene ss una construcción no neumática que está impresa en 3D con polvo de caucho de neumáticos reciclados. La estructura liviana y resistente proporciona una solución duradera y sin pinchazos, que fue diseñada para prolongar la vida útil del neumático. Su estructura abierta proporciona seguridad adicional, mejorando el agarre en mojado al absorber el agua de la banda de rodamiento.
· Generación de su propia electricidad: Toma la energía generada durante la fotosíntesis para alimentar sus propios componentes electrónicos, incluidos sensores integrados, una unidad de procesamiento de inteligencia artificial y una franja de luz personalizable en el flanco del neumático, que cambia de color advirtiendo a los usuarios y peatones de maniobras, como cambios de carril o frenado.
· Comunicación a la velocidad de la luz: Oxygene utiliza un sistema de comunicaciones de luz visible, o LiFi. que permite que el neumático se conecte al Internet de las cosas, lo que permite a su vez el intercambio de datos entre vehículos (V2V) y de vehículo a infraestructura (V2I), que es fundamental para los sistemas de gestión de movilidad inteligente.
Por su parte Alberto Escobar, gerente de movilidad de Automóvil Club de Chile destacó en relación a este producto que “Este prototipo de neumático desafía la lógica actual e intenta dar soluciones concretas para combatir los problemas de contaminación que predominan en las grandes urbes. Detrás de esta propuesta vanguardista existe un cambio de paradigma en la forma de proyectar el futuro de la movilidad inteligente, puesto que son los propios automóviles quienes ayudan a limpiar el aire en los lugares donde transitan”, agrega Escobar.