Una firma, una frase o un dibujo hecho a mano nos puede dejar en evidencia y hablar mucho sobre nosotros mismos. A esta técnica se le llama grafología y por su grado de certeza se utiliza incluso en casos de investigación o búsqueda de la persona adecuada para un trabajo.
La forma es que hacemos la A o la cantidad de detalles de nuestra firma son pistas que hablan de nuestra personalidad e incluso a través de su estudio lograr un mayor autoconocimiento. Y la invitación a profundizar en esta disciplina la realiza Fabiola Escobar, experta en Programación Neurolingüística y directora de la academia Cegratex, que ofrece cursos y talleres basados en la PNL, Coaching y Grafología, y quien señala que “gracias al conocimiento de la grafología es posible hacer una pericia caligráfica, vale decir, la obtención y medición de la estructura de la personalidad de quien escribe en diversas áreas: intelectual, social, control de impulsos, entre otros”.
Señala además que la grafología se fundamenta en el análisis de la letra describe la personalidad de un individuo, también determina características generales y específicas del carácter, acerca de su equilibrio mental (e incluso fisiológico), la naturaleza de sus emociones, su tipo de inteligencia y aptitudes profesionales mediante el examen de la escritura manuscrita.
También la recomienda como una vía para aprender y “conocer otros nuevos talentos y lograr encontrar caminos diferentes en nuestra vida”.
Más información en www.fabiolaescobar.cl