Con la llegada del calor es importante repasar las precauciones que debemos tomar al momento de refrescarnos en alguna piscina o en la playa, ya que durante esta época ocurre un alza significativa de los casos de otitis externa, sobre todo en los más pequeños de la familia.
Según el Dr. Roberto Arias, otorrinolaringólogo de Clínica INDISA, “esta enfermedad consiste en la inflamación de la piel que recubre el conducto auditivo a causa de la infección por bacterias u hongos”.
Esto, se debe a que la acumulación de agua en el oído supone un cultivo perfecto para el crecimiento de los patógenos que causan una inflamación en la piel que recubre el conducto auditivo externo.
Principales síntomas de otitis externa
● Molestias al masticar o bostezar.
● Sensación de tener el oído taponado.
● Pérdida de audición leve.
● Sensación de tener agua en el oído.
● Supuración.
¿Por qué ocurre en las piscinas?
Las piscinas son lugares en los que se acumulan gérmenes que son resistentes a los sistemas de depuración y que pueden acabar causando infecciones en el oído externo, sobre todo en los más pequeños.
En este contexto, el especialista insiste en descartar las piscinas “con exceso de cloro, algo que podemos percibir por el olor o si notamos irritación en la piel y los ojos, ya que el cloro es un factor que aumenta el riesgo de infección”.
Debido a que los oídos de los niños son más cortos, es una infección que los ataca con mayor frecuencia, ya que al ser más pequeños se hace difícil el drenaje del líquido hacia el exterior.
¿Cómo prevenirlo?
Lo mejor para prevenir es tratar de que los niños usen tapones para los oídos o gorras de baño de látex que cubran las orejas. Además, debemos preocuparnos de secar bien y con cuidado, sin mucha fuerza, los oídos después del baño, y en ningún caso utilizar los cotonitos que pueden dejar residuos y propiciar una infección.
El remedio casero más típico y eficaz es el baño después del día de piscina o playa para que el agua tibia de la ducha arrastre el agua que pudo haber quedado. También, sirve la mano calentita de la madre o un paño tibio para aliviar en forma momentánea las molestias si el niño es más pequeño. Otro remedio que alivia es limpiar las fosas nasales con agua con suero, ya que cuantos menos mocos y congestión tenga en la nariz, menos le dolerán los oídos.
Es importante consultar con un especialista en caso de tener un dolor intenso o prolongado. La Unidad de Urgencia de Clínica INDISA es un equipo multidisciplinario de profesionales de la salud, conformado por médicos especialistas, enfermeras y auxiliares de enfermería y servicio. En Clínida INDISA, estamos pendientes las 24 horas del día para atender las distintas urgencias mediante un servicio rápido, cálido y confiable.
Comments