Carlos Seguel, coach profesional y Mentor de Metas
Hoy en día más del 80 por ciento de las empresas están en método de teletrabajo, una decisión que debió tomarse primero por el estallido social de octubre pasado y luego por la grave crisis sanitaria mundial por COVID-19, que terminó por llevar la oficina a los hogares.
Para gran parte de los trabajadores esta situación se ha extendido por más de dos meses y frente a esto hay que convenir que son muchas las personas que todavía no logran establecer el ritmo desde sus casas, teniendo problemas de organización, productividad y para generar tiempos de descanso, los que resultan cada vez más escasos.
El tiempo durante el cual se mantendrá esta situación es incierto, pero se sabe que podría extenderse por varios meses, incluso es posible que el teletrabajo pueda instaurarse como una modalidad permanente, por lo que es importante organizarse para cumplir con estas labores.
Es por eso que quisiera compartir el siguiente decálogo para trabajar desde casa:
Lo primero es establecer mini metas de corto plazo (por ejemplo semanales). Se puede gestionar y organizar el tiempo que se da a distintas tareas según su importancia o urgencia, generando para cada mini meta un plan de acción para su logro.
Otro punto fundamental es el cumplimiento de horarios. Esto quiere decir despertar, desayunar y ponerse en modo trabajo (considerando, inicio, pausas y término). No olvides vestirte y prepararte, aunque tengas muchas ganas de quedarte en pijama. El hábito prepararte para el trabajo pone al cuerpo en modo alerta o modo trabajo, lo que mejora enormemente la productividad en el cumplimiento de estas mini metas.
Al terminar cada jornada es oportuno tomar un tiempo de 20 o 30 minutos para hacer un rastreo de avance del día y cumplimiento de las mini metas. Cuando cumplas alguna de éstas satisfactoriamente, prémiate con pequeños gustos o pausas. Tendemos a premiarnos poco, lo que desarrolla que las cosas buenas no las saboreamos y las malas las resentimos. Cambia este hábito común y haz algo que te de sensación de autoestima o placer.
Invierte tus mejores horas en tus proyectos más significativos. Si lo piensas, seguro tienes horas del día en que eres más efectivo o productivo. Invierte esas horas en metas o proyectos que tiene más importancia para ti (los avances significativos en tus metas importantes te entregan la mayor sensación de autoestima) y recuerda siempre “premiar estos avances”.
También debes trabajar en tu Desarrollo Personal. Establecer metas y sus planes de acción se requiere el desarrollo de la capacidad de cada uno. Todos estamos hechos de lo mismo, pero es la importancia que tengo en la “mejor versión de mí” la que define mi valor en la sociedad o mi entorno personal y laboral.
Recuerda generar empatía en tu entorno. Si en tu lugar de teletrabajo hay más personas (pareja, hijos u otros familiares, genera instancias de conversación como la cena o el desayuno, etc., respecto de “lo que hace el papá o la mamá” mientras teletrabaja, generando una sensación de importancia de esta labor. Con un horario bien definido puedes compartir alguna de las cosas que deseas lograr en el día, propiciando complicidad con tu mini meta diaria y mejorando, a su vez, tu eficacia y su respeto por ella.
Cambia de entornos de trabajo. Si bien es importante tener un lugar oficial de trabajo, es bueno de vez en cuando cambiar de lugar. Una mesa en el balcón si la temperatura acompaña o leer algún archivo en el sillón, si no hay mucho movimiento. Esto evita la sensación de rutina y el asociar tu lugar de trabajo oficial como el lugar donde “tengo” que trabajar.
Establece Redes de Trabajo. Si formas parte de un equipo de trabajo, gestiona y utiliza herramientas de tracking de tareas o metas comerciales, que permiten ver tu avance y el de los demás. Estos sistemas son excelentes motivadores naturales por nuestra competitividad intrínseca.
Para más información sobre este y otros temas de establecimiento de metas y crecimiento personal, puedes ingresar a http://mimentordemetas.com/
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